Con la llegada del verano son muchas las personas que se platean cuál es el secreto para poder tener una buena forma física, en este artículo te desvelamos 5 claves importantes a la hora de ponerte en forma este verano.
Pon en orden tus prioridades
Antes de empezar tu régimen ideal o de plantearte una rutina de ejercicios para estar en forma en verano, tienes que saber qué significa eso para ti. Uno de los errores más comunes que comete la gente al ponerse en forma es no fijar objetivos específicos.
Fisiológicamente, es muy difícil perder una cantidad significativa de grasa corporal al mismo tiempo que se gana músculo. Intentarlo puede estancar tus progresos y dejarte frustrado y desmotivado.
Si quieres ver resultados, sobre todo en poco tiempo, lo mejor que puedes hacer es ceñirte a un objetivo hasta que hayas hecho progresos significativos.
Si no estás seguro, piensa si quieres ganar músculo y tamaño, perder grasa corporal y hacer los músculos más visibles, o centrarte en objetivos de rendimiento.
Para la mayoría de la gente, perder grasa dará lugar a resultados estéticos más evidentes en poco tiempo, ya que es un proceso más rápido que el de aumentar masa muscular.
La nutrición es una parte fundamental de los objetivos de fitness
Una vez que hayas decidido cuáles son tus objetivos, tienes que comer de forma saludable para conseguirlos, ya que el gimnasio sólo te llevará hasta cierto punto sin un buen plan de nutrición.
Perder grasa corporal requiere un déficit calórico, es decir, quemar más calorías de las que se ingieren.
Por el contrario, para ganar músculo es necesario un superávit calórico, con el fin de suministrar a los músculos la energía necesaria para reparar y desarrollar el tejido muscular.
Ejercítate de forma más inteligente, no más intensa
Según los expertos, los mejores ejercicios para obtener resultados rápidos son los mismos tanto si se quiere perder grasa como ganar músculo.
Los ejercicios compuestos, como sentadillas, peso muerto y press, son la mejor opción, porque trabajan grandes grupos musculares a la vez, queman calorías y fortalecen.
Una combinación de ejercicios aeróbicos (cardio) y anaeróbicos (entrenamiento de resistencia) es también una buena forma de maximizar los progresos.
Además, es suficiente con sesiones de entrenamiento de 45 minutos de dos a cinco veces por semana.
Eso significa hacer que cada minuto cuente. Evita los ejercicios que sólo trabajan un músculo a la vez y no trates de «entrenar por zonas» un área del cuerpo.
No escatimes en sueño y recuperación
Otro error común que comete la gente en su camino hacia un cuerpo fitness es no dar a su cuerpo el apoyo que necesita para recuperarse y hacer cambios. El descanso no es negociable.
Dormir es crucial para ganar músculo, para que el cuerpo pueda reparar y regenerar el tejido muscular. También está muy infravalorado para la pérdida de peso.
Elige objetivos realistas para mantenerte en forma todo el año
Aunque puede resultar tentador hacer grandes cambios para mostrar una transformación espectacular este verano, esto puede ser contraproducente para los objetivos a largo plazo.
Si te pasas con la dieta, el ejercicio o ambos, puede que veas resultados, pero lo más probable es que te sientas agotado e incapaz de seguir con la rutina.
Eso significa que puede que no tengas abdominales en verano (o nunca) y no pasa nada. Incluso para los expertos en fitness, factores como la genética juegan un papel importante en la forma de estar en forma de cada persona.
Los grandes cambios físicos también tardan años en producirse. Hacer pequeños cambios, pero cumplirlos a rajatabla, puede permitirte no sólo mejorar durante unos meses, sino también seguir progresando mucho después de que acabe el verano.